Temblor

La novela Temblor de Rosa Montero, escritora madrileña, y editada por Seix Barral en la colección Booket, es una bella descripción que narra la forma como el poder se internaliza en el individuo y lo corrompe, de tal suerte que todas las acciones que este lleva a cabo son para conservarlo, e incrementar la expansión del mismo. En este recorrido nebuloso que la autora plantea, el lector tendrá contacto con el engaño, la avaricia, la destrucción del instinto humano y de los valores éticos hacia la vida, el sufrimiento ante el dolor físico y emocional, las intrigas que el grupo en el poder diseñan para perpetuarse en el mandato sádico y destructor, la corrupción y el engaño, el uso del conocimiento como instrumento de control, además del asesinato como instrumento de castigo a quienes con sus pensamientos van contra las ideas del sistema. 

La novela se ubica a miles de años de esta humanidad que fue  destruida por sus propios avances tecnológicos en el afán de conquistar el mundo y sus espacios. En la historia se hace alusión a nuestro mundo como el recuerdo de una civilización extinta que legó un puñado de conocimientos, y donde sólo unos cuantos pudieron sobrevivir gracias a que habitaban los satélites superficiales desde donde vigilaban el espacio. Fueron esos pocos hombres quienes dieron comienzo a un nuevo mundo donde el orden es establecido por las mujeres, y que para concretar el sistema era necesario la invención una nueva creencia, una religión, además de enseñanzas y leyes que respaldaran a esos sistemas de creencias.

En Temblor la niñez es educada por sacerdotes que ocupan un lugar inferior en la jerarquía del poder, y las sacerdotisas que son las que ejercen el poder absoluto bajo el argumento de que ello es una disposición de La ley, una especie del nuevo dios. En la instrucción que reciben los niños destacan la obediencia y el sometimiento de la voluntad. Aquel que cuestione los mandatos divinos de La ley es asesinado públicamente, pues más allá del simple cuestionamiento a las creencias, lo que está en peligro es el poder mismo.

Agua Fría que es la protagonista de la historia y que bien podría considerarse como la reencarnación de la curiosidad con que la naturaleza dota al ser humano y que lo lleva a cuestionarse sobre la vida y la muerte, se origina una serie de cuestionamientos con respecto a los cambios que se producen en el mundo mismo. Estas interrogantes hacen que se rebele contra los mandatos de La ley y abandone el Talapot, una especie de convento donde reúnen a todos los aprendices con la finalidad de alejarlos de la realidad inmediata, con lo cual inicia un recorrido por el mundo donde descubre nuevas experiencias de ejercer el poder, así como a grupos de personas que se revelan contra La ley y que por ello son perseguidos a muerte. En ese caminar, Agua Fría descubre el amor, pero que, sin embargo, siempre es determinado por la muerte. Agua Fría llega al descubrimiento de que la humanidad, sean de los grupos que sean, sólo buscan combatir a la muerte con la creación de ideas y creencias, así como de religiones. Al ser humano le cuesta aceptarse como un mortal, y es allí donde se origina el primer indicio del poder: la perpetuidad del poder en un linaje.

La novela de Rosa Montero es una historia que exhibe los intrincados nudos del poder, así como la forma en como este se apropia de la voluntad del ser humano y lo reduce a un ser frío y despiadado con sus semejantes. Temblor es la búsqueda de una verdad que sólo se halla en uno mismo, pero que se encuentra atravesada por diferentes ideologías que se enseña al ser humano. A lo anterior hay que añadir como detonante de la historia, que el mundo que habita Agua fría está en peligro. Una neblina asfixiante empieza a extenderse por todos los rincones del mundo y con ello la incertidumbre de qué pasará con la vida. La única que puede detener la destrucción de la vida es ella, Agua Fría, quien verá la caída de un imperio metódico y preciso que basó su poderío en la creencia y la religión comandado por la mujer, y la ascendencia de otro orden más violento e igual de corrupto que basará sus principios del poder en la fuerza.

Este será el mundo gobernado por los hombres.